12 octubre, 2009

personas vs situaciones (2)

Lo complicado:
Pasa que pensando en querer a la gente como es y aceptándole las chiquilladas para enfocarme en sus virtudes dejo de lado algo importante.
Queriéndolos como son, aceptándoles sus chiquilladas y enfocándome en sus virtudes, hay ciertos personajes que, pase lo que pase, vuelven, over and over and over a hacerme llorar con angustia...
y pese a que no esté dispuesta a permitirles que me sigan generando problemas, penas e involucrando en situaciones que no me corresponden.... caigo de nuevo. Hay relaciones que una necesita tener con la gente.
Las enfrentas con risa, con silencio, distanciamiento, discusiones, como sea, pero te las ingenias.
El problema: no siempre resulta.
Y ahí vuelven al ataque. Y vuelven las esperanzas de que una vez más la cosa resulte y seamos todos por fin una familia menos disfuncional. Yeah..you wish.

Cada vez que pasa, cuando intenta volver a encantarme me digo a mi misma "Mathilde, no vayas a caer tan redondita como la última vez, algo se trae,,,algo va a pasar".
Y aunque le de miles de vueltas y me mantenga arisca y desconfiada. Es lindo imaginarse que sí...que ésta es la vencida. Sin embargo volvemos a los engaños, a las chiquilladas, las angustias y el llanto.

Lo siento, porque de verdad no me gusta tener que admitirlo, pero no puedo lidiar con esas personas que, aunque no lo quieran, me hacen llorar prácticamente cada vez que vuelven a aparecer.
Lamentablemente: LAS NECESITO.

He ahí el problema: no se trata de elecciones, como decía Pillo en la entrada anterior.

5 comentarios:

amudiel dijo...

Sin ánimos de sonar conformista yo diría que el truco está en aprender a aceptar.

Hay ciertas circunstancias que maquillándolas o revistiéndolas de caramelo para que su sabor sea menos amargo no logramos el efecto querido, y terminamos sólo poniendo en un envase bonito un veneno mortal.

Me quedo con las botellas transparentes, ojalá con poca etiqueta. Con los pros y los contras lo más claro posible, cosa de saber con qué chichita nos estamos curando... o, en el peor de los casos, por lo menos intuirlo.

Una vez aceptados dichos hechos, está en nuestras manos la re-evolución. Es el primer paso para poder entenderlos en profundidad.

Besotes para ti =)

Anónimo dijo...

Básicamente describes la relación que tengo con mi padre. Sin más que agregar.

Mathilde dijo...

Pillo: precisamente por no queer maquillar las cosas es que estoy en esta ahora. Me carga que me anden con chiquilladas y que se hagan los lindos después. Y no es acerca de elegir....¡ojalá fuera ese el tema!
Tobal: entre otras, básicamente describo la relación que también tengo con el mio....entre otras

Mathilde dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Francisca dijo...

Ojo! hay que tratar de no cambiar a la gente en cosas esenciales, pero nadie te está pidiendo ser un ángel, que no siempre se puede :)
Saludos!!!
Fran