Se fueron como a las 5:30 o 6 de la mañana, nos repartimos las cosas que habíamos comprado, les dimos más pan y más agua para que sobrevivieran sin problemas la caminata. Nosotros no los acompañaríamos porque a los chicos se les había mojado todo y uno estaba que se moría de resfrío así que "no podían hacer el viaje".
Nos fuimos del camping un poco más tarde a la estación del tren.
Hola tienes pasaje barato para hoy? (ese cuesta 31 dólares)
-Sí, sale a las 8 de la noche, pero el "vista no sé qué" sale en 20 minutos. Cuesta 43.
Ya, filo, vámonos en ese no más.
Se puede pagar en dólares y soles solamente. A mi me quedaban 3 dólares y cero soles.
"Te puedo pagar en euros?" (Soy terrible de internacional)
No.
"Cómo:no?"
No pues
"No tengo soles y me quedan 3 dólares, te puedo pagar en euros"
No
"Y entonces qué hago?"
Vaya a cambiarlos a una casa de cambios.
"Pero me van a estafar! (en Aguas Calientes todo te lo cobran por 3 o 4) y además no alcanzo, el tren ya se va... te los pago a ti y tú haces el cambio!" (ya me había empezado a poner nerviosa)
No, ni siquiera conozco el cambio.
Y ahí me entraron los monos y casi lo puteo, 43 dólares para un viaje de q hora es como mucho, no? además no me aceptaban la mejor moneda del universo???!!! y tenía sueño........pero Felipe me dijo "ya, yo te pago y de ahí arreglamos"
Yo sólo pensaba y decía "estos hijos de puta que por ser uno turista lo quieren saquear, más cara se weá de tren, ni siquiera quería irme en tren y tenemos que viajar en el caro...hijos de puta!"
Nos subimos al tren y estaban nuestros camaradas de Córdoba que se habpian llenaod la boca diciendo que los porteños eran los chantas hahahaha.
Teníamos azafatos que hablaban perfecto inglés.
El tren tenía ventanitas en el techo para ver mejor el paisaje. La weá cursi.
Nos pasaron unas cajitas super lindas de cartón. La abrí con desconfianza y tenía desayuno adentro. Ya... ahpi se me anduvo pasando un poco la rabia porque el pan estaba exquisito. Nos habríamos llevado las cajitas...PERO decían algo así como "no se la lleve, nosotros nos encargaremos del reciclaje"...y claro: la de Felipe tenía una mancha de comida. plop!
Ibamos escuchando música andina. El azafato derrepente se puso a aplaudir al ritmo de la música y un weón disfrazado de algo folclórico se puso a bailar por el vagón con un peluche de llama. Estábamos todos aturdidos por lo que veíamos.
Luego de eso volvimos a la música andina hasta que de pronto empezó a sonar Dancing Queen y el Felipe se empieza a reir... Ya me tenía un poco chata la canción, mirpe pal pasillo...y es que no había cachao lo que ocurría..... toda al gente estaba vuelta loca aplaudiendo y chifalndo y tirando piropos..porque los dos azafatos, la chica y el chico se habían puesto a modelar unas chombas de lana de alpaca por el pasillo del vagón. Bizarrísimo!
Atrás de mi asiento iba un gallo que se pasaba a cada rato la mano por la cara...estábamos todos curados de espanto con el showcito de los 43 dólares.
Rabié y putié....pero valió la pena absolutamente.
Una experiencia que tenía que vivir.
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